I won, I won, I won!!!
La verdad es que últimamente es difícil terminar de ver una película que te haya parecido “buena” y no salir hecho polvo, replanteándote todo tu mundo, de donde venimos y hacia donde vamos...
Eso no pasa con Little Miss Sunshine, al contrario, es de esas películas de las que sales con una sonrisa en la boca y desando comentar con tu acompañante lo mucho que te has reído.
Y es que es una historia simple, bonita y contada de una forma que te hace sentir parte de ella, como el octavo pasajero de viaje, empujando la furgoneta.
Y es que quién no ha soñado alguna vez con viajar en una Volkswagen amarilla???